
Para esta receta no pondré ni ingredientes! Es tan sencilla, versátil y deliciosa que cuanto más breve antes podrás ir a comer.
Blanqueamos las verduras que hayamos elegido escaldandolas en agua hierviendo durante unos segundos (dependiendo de la hortaliza que sea necesitará más o menos tiempo) retiramos del agua y enfriamos rápidamente en agua con hielo para cortar la cocción y no perder ni su color ni sus propiedades.
Mezclamos 1 litro de leche de coco con 1 cucharada de pasta de curry rojo (dependiendo del nivel de picante que deseemos)
Calentamos el wok y introducimos las verduras, las movemos enérgicamente para que no se peguen pero que se vayan tostando ligeramente en el exterior durante un par de minutos.

Para terminar añadimos nuestra mezcla de curry rojo y coco al wok y dejamos cocinar todo un par de minutos más y… listo!